«Todo debería cambiarse en la industria de la moda»
Revolucionó la industria de la moda al ver en los residuos un recurso valioso para generar nuevas prendas, creó su propia empresa responsable y sustentable, y filmó un documental para concientizar al mundo. Desde Estonia, una charla con Reet Aus, diseñadora y protagonista de Out of Fashion.
¿Cómo comenzó a interesarse en las problemáticas detrás de la industria de la moda?
Estaba realizando mis prácticas y comencé a utilizar la técnica de upcycling para mis entregas porque, a través de mis estudios, conocí desde adentro cómo funcionaba el mundo de la moda. No quería producir vestimenta de la misma forma y busqué soluciones ante ello.
¿Cuáles es el principal problema que advierte hoy en la industria de la moda?
Uno de los problemas más importantes es la cantidad de residuos que genera. Por eso decidí empezar a reaprovechar, a reutilizar, a reciclar todo tipo de “vestimenta basura”, de materiales que para otros eran residuos y para mí se convertían en recursos. Así fue como logré presentar mi primera colección en 2002.
¿Es necesario entonces realizar modificaciones al final de la industria con lo que se genera o desde un comienzo con el diseño?
En verdad, todo debería cambiarse en la industria de la moda. Si consideramos la mega producción de ropa, el gran problema es que no hay vínculo entre los diseñadores y los productores. Desconocen cómo realizan el trabajo que tienen que hacer. Por eso es, al mismo tiempo, tan difícil de cambiarlo. Tenemos que alentar diseñadores más conscientes, por supuesto, y también consumidores responsables. Las personas son las que determinan la posición de las marcas en el mundo de la moda. Los diseñadores sustentables no se sienten cómodos en una industria con las características actuales.
Realizó todo este hallazgo durante sus estudios universitarios, ¿cuán importante es el nivel académico ante el problema?
Es extremadamente importante, estás formando a los futuros diseñadores de moda. De hecho, hoy me desempeño como investigadora en un estudio donde doy cursos y este año abrimos el Laboratorio de Sustentabilidad con estudios científicos de impacto ambiental de la industria. El objetivo es comprender cómo hacer posible un diseño y una producción sustentables. Y creo que ahí se encuentra la cuestión clave: educar lo máximo posible sobre el tema.
¿Cómo define “upcycling”?
Upcycling significa tomar un material como lo que es y, a través del diseño, aprovecharlo al máximo posible, sin tener que gastar toneladas de recursos para que ello sea posible. Es algo tan sencillo como eso: tomar, usar, aprovechar un material como lo que es. En el reciclaje se hace una transformación para, por ejemplo, hacer un nuevo material. En cambio, para la industria de la moda, upcycling es la forma más fácil de reducir al mínimo posible el problema de la generación de residuos. Te permite usar al máximo lo que tienes en la fábrica, a través de un diseño inteligente.
¿Cuáles fueron los desafíos que tuvo que enfrentar como emprendedora al ir en contra de una industria tan grande?
La verdad es que no sé lo que es emprender con otras características. Mi empresa tuvo la sustentabilidad en su ADN desde un comienzo. Por supuesto que tuvo sus dificultades financieras, pero considero que así lo es para cualquier emprendimiento en sus inicios. Obvio que ello se profundiza cuando estás intentando presentar algo que nunca se había hecho antes. Es decir, tuvimos que buscar nuestras propias soluciones a los problemas que nos enfrentábamos.
¿Qué tipo de consumidores están interesados en sus productos?
La mayoría de mis clientes realmente quieren consumir de forma diferente. Siento que son muy leales como consumidores. Se acercan porque les atrae el diseño, por supuesto, pero también por el concepto que tiene la propuesta. Su interés está creciendo y de manera muy rápida.
¿Por qué decidió realizar un documental al respecto?
Porque sentí que había una necesidad de comunicar la problemática existente en la industria de la moda. Esa fue la principal razón. Comenzamos a hablar con Jaak Kilmi, el director, hace seis años y él se mostró muy interesado con la temática; no se hablaba ni leía sobre el tema, y era necesario comunicarlo. Hoy, el interés de la gente es mayor.
¿Con qué se encontrarán los espectadores al ver Out of Fashion?
La película se vincula más a los problemas ambientales que hay detrás de la industria de la moda, y no tanto a los sociales, vinculados a la cantidad de desperdicios que en ella se generan constantemente. El documental busca proponer y buscar soluciones. No tenemos ninguna postura negativa ante nadie en puntual, sino que mostramos el problema a través de una persona y cómo podemos realmente iniciar un cambio. Es una historia desde la búsqueda de solución y el necesario cambio en la forma de hacer la ropa que usamos. He recibido cartas de todo el mundo donde la gente me agradece por la inspiración que les ha generado la película.
¿Podemos esperar una segunda parte?
No en este momento, pero sí me encantaría hacer un documental sobre la toxicidad en la industria de la moda. Es otro de los grandes problemas a los que nos enfrentamos, es muy complicado y necesitamos saber más sobre él.
UNA TRAYECTORIA SUSTENTABLE
Reet Aus es diseñadora de moda desde 1997. En 2002 creó sus propias colecciones de ropa, basadas en el principio de upcycling. Escribió su tesis doctoral sobre las posibilidades del upcycling en la industria actual y se desempeña como investigadora Senior en la Academia de las Artes de Estonia. Fue considerada la Mujer del año en 2013 por la revista Anne ja Stiil y en 2014 por el BPW Estonia. De 2009 a 2014 filmó el documental Out of Fashion: un viaje desde Tallinn, pasando por casas de moda europeas y las plantaciones de algodón de América del Sur, hasta llegar al epicentro de la producción masiva en Bangladesh. Su consejo a los espectadores: «Que hagan lo mismo que yo al comprar: preguntarse a quién va su dinero. Es un primer interrogante para entender el problema».
| Artículo publicado en Revista Ecosistema del Green Film Fest |